Pregunta:
Lo
que
nos
impide
olvidar
la
mente,
es
el
apego
al
placer
de
los
sentidos.
¿Cómo
llegar
a
ese
desapego?
Maharaj: El apego se produce a causa del conocimiento. Si no le tiene miedo, entonces usted puede rebasarle y el apego no puede persistir. Los apegos a los sentidos son debidos al cuerpo y usted no es eso. Un cadáver ya no tiene apegos. El conocimiento penetra su cuerpo cuando usted toma nacimiento y todos los apegos son creados por los sentidos. Los ojos ven, pero es usted quien lo sabe. Cuando usted oye un sonido, es conocimiento; cuando saborea, es conocimiento. De hecho, todo se debe al conocimiento. Cuando usted dice, «He oído», es con el conocimiento con lo que usted dice eso. Así pues, el cuerpo está conectado al conocimiento, y la conexión crea todo eso. Ver, oír, hablar, comer, moverse, todo se produce a partir del conocimiento. Si el conocimiento desaparece, los diez sentidos ya no funcionan en el cuerpo. Todas las cosas ilusorias han aparecido a partir del conocimiento; así pues, ¿por qué considerarle verdadero? Ocurre lo mismo en un sueño; usted ve y hace toda suerte de cosas, pero al despertar dice, «¿He hecho yo todo eso?» No, ya que usted sabe que es falso. Aquí es lo mismo, se trata de un largo sueño donde ocurren una multitud de cosas; pero, no obstante, usted dice, «Yo he hecho esto», mientras que, de hecho, usted no existe. ¡Eso es lo que usted no comprende!
Es gracias al conocimiento que usted puede decir «Yo he hecho esto». Si mata a alguien, usted lo olvida cuando duerme, ¿no es así? Cuando usted se olvida, no queda nada. Entonces usted se despierta del sueño, se establece la conexión con el conocimiento y sigue todo lo demás, el miedo, los acontecimientos, etc. Usted no es el cuerpo, ¿por qué se inquieta entonces? Todos los apegos son producidos por el conocimiento a través de los sentidos. Usted ve y olvida, oye y olvida. Si un mentiroso afirma, «Yo nunca he dicho eso», ¿puede usted recuperar sus palabras en alguna parte? Mientras el conocimiento está aquí, el apego también está aquí. Comprenda simplemente que no es verdadero, que todo se debe a la ignorancia. ¿De dónde viene el conocimiento? De la ignorancia. Usted ha tomado nacimiento en la ignorancia, y de ahí ha surgido el conocimiento. Después aparece todo; la mente, los sentidos y el ego se ponen en acción. Pero todo eso es asunto del cuerpo, no suyo; usted no es eso. Comprenda que la realidad no tiene nada que ver con todas esas cosas. Como en el ejemplo de la película que aparece sobre la pantalla. La pantalla misma no se inquieta por nada. En la película usted llora, canta, reza o mata a alguien; ¿pero que queda cuando se acaba la película? ¿Es real el héroe? Si quisiera saber quién es, desaparecería y sólo quedaría la pantalla.
Este sueño ha aparecido debido a la ignorancia, y usted dice: «Yo soy esto». De ahí viene el apego. Mientras el cuerpo está vivo, los diez sentidos deben funcionar, pero comprenda que este cuerpo no es mí mismo, ni mío. Si su vecino muere, usted no muere con él, ¿no es así? Así pues, considere su cuerpo como si fuera su vecino y no usted mismo. Usted acepta el pensamiento: «Yo soy el cuerpo», y entonces todo le ocurre y le afecta a usted. Si usted comprende que «yo no soy el cuerpo», los apegos y los sentidos mismos ya no tienen ningún valor para usted. Los sentidos no son nada, no funcionan más que por el conocimiento; el conocimiento es su base, sin él no pueden funcionar. Si usted tiene un ataque cerebral, el conocimiento se desconecta. Entonces usted ya no tiene conocimiento de nada. Usted ve pero no lo sabe, usted tiene ojos pero no puede reconocer. El cerebro, que es el conocimiento, está desconectado; la facultad de pensar está interrumpida. ¿Puede iluminar la bombilla si no hay electricidad? Así pues, cuando su vecino muere, usted no muere con él. De la misma manera, sepa que usted no es el cuerpo. «Yo soy el cuerpo» es el efecto de la ignorancia. Pero incluso cuando usted dice, «Es mi cuerpo», eso mismo significa que usted es otra cosa que el cuerpo, ¿no es así? Si usted dice, «Es mi casa», usted no es la casa. Se debe a la ignorancia el que este «mío» haya devenido «yo». Los sentidos funcionan solos, pero usted dice: «Yo veo».
Comprenda que este cuerpo no es mí mismo; después deje que los sentidos funcionen o desaparezcan, ¿por qué inquietarse? Si su amigo mata a alguien, usted dirá quizás, «Él ha cometido un error», pero no dirá, «Yo he matado». Si dice, «Yo soy la mano que ha matado», entonces será llevado a la cárcel pues usted se identifica con el cuerpo. Los sentidos le han venido a causa del conocimiento, pero si dice, «Yo soy los sentidos» o «Los sentidos son míos», entonces usted está ligado a la acción que se produce. Debido a que el conocimiento está aquí, todo ocurre y se pone en acción. Cuando usted duerme, el conocimiento se extingue, los sentidos ya no funcionan. De la misma manera, cuando el cuerpo muere, cuando el poder interno se desconecta, ¿qué queda? Nada. Así pues, mientras el conocimiento o el poder está conectado, usted siente que todo es real; pero usted debe comprender, mientras el poder está conectado, mientras el conocimiento está conectado, que nada es real. Es así como usted se libera de él. Los ojos ven y usted dice «Yo veo», la nariz huele y usted dice «Yo huelo», eso es el ego. Usted acepta que el «yo» es el hacedor, mientras que usted no puede hacer nada. El cuerpo y el conocimiento entran en contacto, se conectan y todo se manifiesta. ¿Puede hacer algo el conocimiento por sí solo? Sin la bombilla, la electricidad no puede dar luz; y sin la electricidad, la bombilla no puede lucir. Así pues, una y otra son necesarias para producir la luz. El poder, el conocimiento está conectado al cuerpo, y el cuerpo funciona; pero si usted le considera como «mío», eso es el ego. Sin la muerte del ego, usted no puede comprender.
El «yo» no tiene ninguna entidad; es simplemente un pensamiento que ha surgido, y ahora usted debe olvidarle. Con el pensamiento mismo debe comprender que usted no es eso, «Yo no soy el cuerpo». En un sueño usted mata a alguien o reza a Dios; los dos actos tienen el mismo valor puesto que no existen. Matar o adorar no son verdaderos. ¿Está usted de acuerdo? Lo que no es real, usted lo considera como verdadero a causa del ego; pero, en realidad, no ocurre nada, y es por eso que se llama ilusión. Los ojos ven, pero lo que ven es falso, no es real. Usted oye, ¿pero qué oye? Palabras que desaparecen en una fracción de segundo. La lengua saborea, pero el sabor se desvanece instantáneamente y no queda nada. En su estómago, nada dice nunca, «Yo soy un pastel». Todo se mezcla y deviene Uno. El conocimiento está hecho así, entra en contacto y desaparece al momento siguiente. Deja una impresión y desaparece instantáneamente; deviene ignorancia.
Así pues, todo se produce a causa del conocimiento, pero usted debe comprender que el conocimiento es la mayor de las ignorancias. El apego se crea, y por la ignorancia usted le considera como real. Usted no hace nada, pero dice, «Yo hago todas estas cosas». Lo que usted dice es falso, ¿quién es su responsable entonces? Usted no hace nada, pero dice, «¡Yo hago!» Olvide ese «yo» y usted es libre de toda miseria, de todo sufrimiento y de toda ignorancia. El gozo y el sufrimiento son producidos por el ego, pero los aconteceres ocurren y desaparecen, no se mantienen. Todo tipo de películas son proyectadas sobre la pantalla, pero la pantalla no se inquieta por ello, sabe que todo es falso. Desde que usted comprende eso, su problema desaparece, ya no es. Los apegos conciernen al cuerpo, no a usted. Lo que no es, no puede ser real. Usted ama a una mujer y se casa con ella, pero después de un cierto tiempo ya no la ama y se separa de ella. Las atracciones y las repulsiones no son reales, son el funcionamiento de la mente. El conocimiento es el ego. El ego produce toda suerte de cosas. Así pues, olvídele, y usted es Él, la realidad. En un sueño usted tiene mujer e hijos, pero cuando acaba el sueño, ¿llora usted su desaparición? No. Usted dice simplemente que era un sueño. La comprensión debe venir, y cuando viene, mata a la comprensión misma, el conocimiento mata al conocimiento, el pensamiento mata al pensamiento. De hecho, ¿qué es la comprensión? Es el conocimiento de que el conocimiento es siempre falso, es el conocimiento de lo que no es real. Usted quita una espina con la ayuda de otra espina, pero las dos son espinas. De la misma manera, la ignorancia es suprimida con la ayuda del conocimiento, pero los dos son falsos. Deséchelos y usted está fuera de la ignorancia y del conocimiento; deséchelos y usted es Él, la realidad.
Pregunta:
Maharaj
dice
que
después
de
su
muerte,
la
persona
realizada
ya
no
vuelve
nunca
al
cuerpo,
ya
no
vuelve
nunca
al
mundo.
¿Significa
eso
que
todo
se
disuelve?
Maharaj: Para él está disuelto todo, pues ha comprendido que no ha nacido nunca y que, por consiguiente, no morirá nunca. Él no ha nacido nunca, sólo el cuerpo ha tomado nacimiento a causa del deseo de nacer. Cuando él comprende que este deseo mismo es falso, ¿cómo puede morir? Él dice, «Yo no muero nunca, sólo la realidad es, eterna». Todos los seres mueren en este mundo, pero el que ha comprendido: «Yo soy Él, la realidad», no muere nunca. ¿Cómo podría morir lo inmortal? Sólo muere lo mortal, y eso que es mortal le ha recubierto a usted; lo que desaparece es lo mortal, pero usted no desaparece. Usted es inalterado, siempre el mismo. Todos los problemas y las enfermedades vienen al cuerpo, pero no a usted. Sólo cuando usted dice, «Yo soy el cuerpo» le afecta la enfermedad; cuando usted se identifica al cuerpo, le afecta todo, el nacimiento, la muerte, la enfermedad. Si usted dice, «Yo no soy el cuerpo», entonces no es tocado.
Es el ego el que le hace decir «Yo he nacido»; pero, de hecho, usted no nace nunca, usted no muere nunca. Sobre la pantalla, las películas aparecen y desaparecen, pero la pantalla no es afectada; es siempre idéntica a sí misma, muestra enfermos, gentes que mueren, ¿pero acaso muere con ellos? De la misma manera, la realidad permanece incambiada, y todo lo que usted ve y percibe sobre ella no es nada más que su sombra o su reflejo. ¿Pierde su valor el oro si se funde o se usa para fabricar joyas? El oro permanece siempre oro. Haga usted con él una imagen de Dios o una imagen de perro, el oro no cambia. ¡Incluso si usted hace con él un asno, el oro no deviene un asno! Lo que usted ve y percibe no es nada; usted da nombres y formas, pero éstos son falsos; sólo la realidad es. Todo no es más que la sombra de la realidad. Ya sea que esté en el brazalete de una prostituta o en la corona de un dios, el oro vale lo mismo. De igual modo, todo aparece y desaparece en la realidad, pero la realidad permanece siempre la realidad; por eso se la llama así. La realidad no cambia nunca, no nace nunca y no muere nunca; y usted es la realidad. Comprenda que el cuerpo muere, pero no usted. Usted llora cuando está a punto de desaparecer, pues piensa, «Yo soy el cuerpo». Las personas realizadas dicen, «¡El cuerpo me ha recubierto como un absceso!»; entonces, cuando el cuerpo se va, piensan, «¡Formidable, el absceso desaparece!».
La mente es una cosa increíble que no sabe nunca lo que quiere. Cada día desea algo más, siempre más y más. Uno se deshace fácilmente de un absceso, pero el deseo de tener un cuerpo es tan fuerte, tan poderoso que usted no puede comprenderle. El cuerpo siempre tiene dolores en un sitio o en otro, y los deseos también son dolorosos para la mente. La mente siempre está en conflicto y todo es difícil para ella. Si usted no hubiera tomado nacimiento, no habría ningún problema; el sueño aparece para el que se duerme, el que no duerme no puede soñar. Dormir significa olvidarse de usted mismo, de la realidad, y desde entonces comienzan los trastornos. El que no se olvida, es siempre la realidad. La realidad no tiene forma ni nombre, y si usted no los crea, entonces es libre. Así pues, yo digo a todos, «Usted es la realidad, pero ha tomado forma y nombre, eso es el error». Usted debe olvidarlos ahora. Sobre la pantalla, usted ve al héroe y al malvado, usted los juzga a uno bueno y al otro malo, pero no hay más que la pantalla. El resto no es nada. ¿Qué comentarios se pueden hacer entonces a propósito de nada? La pantalla muestra igualmente al villano y al héroe, pero permanece siempre virgen, no alterada. Nada la toca. Si los personajes comprenden lo que son, desaparecen y sólo queda la pantalla. Olvide el ego, nada más; todos los problemas que le asaltan se deben sólo a él. El ego significa conocimiento, y el conocimiento, como la ignorancia, es la causa del olvido de usted mismo. El conocimiento crea lo falso, es la causa de todo sufrimiento. ¿Por qué ha dicho Cristo, «Conózcase a usted mismo»? El «usted» desaparece, eso es conocerse a sí mismo. Conózcase a usted mismo y usted conoce el mundo. Si usted se conoce, ni usted ni el mundo se mantienen, los dos desaparecen, y usted es libre; sólo la realidad permanece.